Tuesday, April 9, 2013

Pasos para redactar

Estos son los pasos para comenzar a redactar cualquier tipo de documento en seis practicos pasos:

  1. Selección del tema 
  2. Búsqueda de información
  3. Elaboración de un bosquejo 
  4. Redacción de un borrador 
  5. Revisiones 
  6. Redacción definitiva

1. Selección del tema.

Puede tratarse de un tema que te hayan pedido desarrollar... Si no es así, elige redactar sobre algún asunto de tu interés.

2. Búsqueda de información.

La búsqueda de información sobre el tema es intuitiva, vas a Google y escribes sobre el tema, lees en la Wikipedia y demás, pero ¿qué sucede cuando tienes que comenzar desde cero? Estas son algúnas técnicas de redacción que te pueden ayudar para elaborar tus escritos:

Técnica de las ocho preguntas

Para informar sobre un hecho, la técnica de las ocho preguntas es muy efectiva: Hazte las siguientes preguntas y contéstalas:

  1. ¿qué?
  2. ¿quién?
  3. ¿dónde?
  4. ¿cuándo?
  5. ¿por qué?
  6. ¿cómo?
  7. ¿cuál?
  8. ¿cuántos?

Técnica de los siete imperativos

La técnica de los siete imperativos es muy útil para todo tipo de escritos:

  1. Descríbelo: ¿cómo lo ves, sientes, hueles, tocas o saboreas?
  2. Compáralo: ¿a quién se parece o de qué se diferencia?
  3. Relaciónalo: ¿con qué se relaciona?
  4. Analízalo: ¿cuántas partes tiene?, ¿cuáles?, ¿cómo funcionan?
  5. Aplícalo: ¿cómo se utiliza?, ¿para qué sirve?
  6. Arguméntalo: ¿qué se puede decir a favor o en contra?
  7. Conclúyelo: ¿qué conclusiones sacas?

Técnica de múltiples preguntas

Para temas en general, la técnica hazte todas las preguntas que se te ocurran es muy efectiva. Por medio de un buen número de preguntas, generas un cuestionario para buscar luego las respuestas. Por ejemplo: (Del Río, 1993:5):
  1. ¿qué es?
  2. ¿cómo es?
  3. ¿para qué sirve?
  4. ¿cómo se administra?
  5. ¿cuánto mide?
  6. ¿qué le hace falta?
  7. ¿es seguro?
  8. ¿otros usos?
  9. ¿dónde está?
  10. ¿instalaciones?
  11. ¿quién lo mandó construir?
  12. ¿cuándo se construyó?
  13. ¿cómo es en relación con otros?
  14. ¿cuánto se gasta en su mantenimiento?
  15. ¿por qué es importante tenerlo?

Técnica de términos útiles

La técnica elige dos o tres términos clave es útil para cualquier clase y tamaño de escritos. por ejemplo: Luis trabaja como guía turista: su trabajo es estimulante, pero agotador.
Palabras clave: estimulante y agotador.

Ahora, con las palabras elegidas perfectamente podemos generar una serie de ideas que nos permita crear nuestro texto final:


Estimulante:

  • Viaja mucho
  • Cuenta con 10 años de experiencia
  • Conoce muchos lugares
  • Trata con mucha gente importante
  • Adquiere mucho acervo
  • Domina varios idiomas
  • Gana mucho dinero
  • No tiene horario fijo


Agotador:

  • No tiene tiempo libre
  • Trabaja toda la semana
  • Tiene que estar alegre y sociable todo el tiempo
  • No cuenta con tiempo para formar una familia
  • Debe estar disponible las 24 horas del día cuando está guiando a un grupo

Texto final, basado en las ideas anteriores:

Luis es un excelente guía turista con diez años de experiencia. Conoce los cinco continentes por lo que su acervo es muy amplio y culto. No hay lugar del planeta que no haya visitado cuando menos una vez. Ha tenido que aprender varias lenguas y, por consecuencia, es un conversador muy ameno por lo que todo tipo de personas de alto nivel intelectual y cultural buscan su compañía.
Por otro lado, no le queda tiempo para cultivar una vida privada... También se siente agotado, ya que casi no descansa y siempre tiene que estar disponible y presentable y, además, debe mantener una perenne actitud positiva y lucir una eterna sonrisa.

Técnica de lluvia de ideas

Lo anterior recuerda mucho a la lluvia de ideas, esta técnica dura pocos segundos o minutos, durante los cuales, el autor se dedica solo a reunir información para el texto. Se sumerge en la piscina de su memoria y de su conocimiento para buscar todo lo que le sea útil para la ocasión.


Consejos para la lluvia de ideas:

  • Apúntalo todo, incluso lo que parezca obvio, absurdo o ridículo. ¡No prescindas de nada! Cuantas más ideas tengas, más rico será el texto. Es posible que más adelante puedas aprovechar una idea aparentemente pobre o loca.
  • No valores las ideas ahora. Después podrás recortar lo que no te guste. Concentra toda tu energía en el proceso creativo de buscar ideas.
  • Apunta palabras sueltas y frases para recordar la idea. No pierdas tiempo escribiendo oraciones completas y detalladas. Tienes que apuntar con rapidez para poder seguir el pensamiento. Ahora el papel es solo la prolongación de tu mente.
  • No te preocupes por la gramática, la caligrafía o la presentación en este momento.
  • Nadie más que tú leerá este papel.
  • Juega con el espacio del papel. Traza flechas, círculos, líneas, dibujos. (Cassany, 1999: 63).
  • Cuando no se te ocurran más ideas, relee lo que has escrito o utiliza una de las siguientes técnicas para buscar más.



Técnica de escritura libre o automática

La técnica de escritura libre o automática consiste en ponerse a escribir de manera rápida y constante apuntando todo lo que venga a la mente en ese momento sobre el tema que escribimos, o sobre otros aspectos relacionados con él. Hay que concentrarse en el contenido y no en la forma, valorar la cantidad de texto más que la calidad; y, sobre todo, no detenerse en ningún momento. Se recomienda empezar por sesiones de diez minutos, que pueden llegar hasta veinte o treinta, con la experiencia.

Es muy útil para generar ideas y superar bloqueos. El texto resultante tiene muchas deficiencias que se corregirán al desarrollar la redacción y reescribir la versión final.

Técnica de frases empezadas


La técnica frases empezadas: es bastante más concreta que la de lluvia de ideas. Sirve para orientar la redacción.

  • Lo más importante es...
  • Tengo que evitar que...
  • Es necesario que no olvide que...
  • No estoy de acuerdo con...
  • Me gustaría...
  • Opino...
  • La razón más importante es...
  • Quiero...


La técnica de mapas y redes

Los mapas (de ideas, mentales, o denominados también árboles o ideogramas) son una forma visual de representar nuestro pensamiento. Consiste en dibujar en un papel las asociaciones mentales de las palabras e ideas que se nos ocurren en la mente. (Cassany: 1999, 58).

Finalmente, Técnica gráfica


Escoge una palabra nuclear sobre el tema que escribes y apúntala en el centro de la hoja, en un círculo. En seguida, anota todas las palabras que asocies con ella y circúlalas. (Cassany, 1999: 59). El procedimiento dura unos cuantos minutos. Luego, anota cada palabra como encabezado y escribe todas las que se te ocurran que tengan relación con la palabra principal. El papel se convierte en la prolongación de tu mente y en un buen material para iniciar la redacción. Elige el punto de vista desde el que vas a abordar tu texto.

Finalmente, si tomas en cuenta cada uno de los aspectos anteriores, podrás redactar con facilidad un escrito sobre “Educación Superior” o sobre “El mar”, etcétera.

3. Elaboración de un bosquejo. 

Una vez que tengas la información, organízala con los siguientes pasos:

  1. Determina cuál es la idea principal o tema.
  2. Ordena las demás ideas de acuerdo con su importancia, de mayor a menor.
  3. Expresa cada idea con enunciados claros.
  4. Organiza el texto.

4. Redacción de un borrador. 

Elabora un primer intento de tu documento, que integre todos tu esfuerzo en un borrador.

5. Revisiones.
En un proceso eficiente de revisión se debe tomar en cuenta lo siguiente:


  1. Sirve para mejorar globalmente el texto.
  2. Afecta a fragmentos extensos de texto, las ideas principales y la estructura.
  3. Pueden surgir nuevas ideas.
  4. El cambio de un término o palabra puede motivar a rehacer la estructura de toda una frase o párrafo.

6. Redacción definitiva.

Después de efectuar una última revisión, puedes elaborar el texto definitivo. Todavía recomiendo una última revisión después de poner distancia temporal; es decir, que conviene dejar a un lado el texto definitivo por un tiempo determinado -según la urgencia que se tenga de presentarlo-, y volver a efectuar otra revisión antes de darlo por terminado.

Espero que este artículo os sea de mucha utilidad, hasta la próxima.